Vamos a ver de que modo podemos decir la verdad sin que seamos ofensivos, dado que ARALBA tiene un gran respeto tanto por la Amorc como por cualesquiera otra Escuela de Misterios rosacruces, cuyo propósito principal no sea otro que la mejora, en todos los sentidos, del Ser Humano.La Rosacruz como tal Organización, aquí en la Tierra, no existió jamás, por lo menos con la tradición iniciática, ceremonial, que se le ha venido presuponiendo.
Ese afán filosófico que propugna sí y, evidentemente, se remonta a los orígenes de la humanidad y de su toma de consciencia como individuos. En ese aspecto, todos los seres de la especie humana que alguna vez se han hecho las preguntas de ¿que somos, de donde venimos, que hacemos aquí y a donde vamos? podría considerarse que son estudiantes rosacruces, pues buscan las repuestas que, tradicionalmente, la Orden Espiritual contiene en su invisible Arca de Sabiduría.
Lo que fuera un Movimiento, con consignas encriptadas en símbolos poco comprensibles, originado en la época de Carlos V / Felipe II, en el Palatinado Alemán alrededor de la figura de Lutero por el Pastor protestante Valentín Andreae, con el único propósito de intentar unificar en una gran Federación Evangélica a todos aquellos movimientos protestantes que se encontraban contra el Papado y sus dispensas; con el transcurrir de las generaciones, y tras repetir la incansable cantinela de la pretendida “Orden Rosacruz exotérica” inexistente en toda regla, pues bueno, terminó tomando forma dentro de los movimientos masónicos operativos (Albañiles constructores de Templos Góticos) y de otras organizaciones filantrópicas y heréticas afines.
De vez en cuando, ya cerca de nuestro Siglo, algún avispado comerciante instruido en el marketing piramidal estadounidense de la época, ha venido registrando el nombre Rosacruz, Rosicruciano..., de un modo u otro para montar su chiringuito teosófico/antroposófico particular y transmitir ¿vender? las enseñanzas de los antiguos filósofos griegos, de los antiguos sacerdotes egipcios o de los cabalistas y hermetistas de la Edad Media, así como lo poco que se conocía de los gnósticos del cristianismo primitivo. Por cierto, ahora también está, a disposición de estos movimientos, una porción mayor pues a través del descubrimiento de los escritos de Nag Hammadi se conoce más de aquellos Cristianos platonistas.
Virtud sin embargo, que sí tuvierón a bien Doña Madame Blavasky (Fundadora de la Sociedad Teosófica) o Don Rudolph Steiner (Creador de la Antroposofía), dado que, en ningún momento, a pesar de ser los auténticos depositarios, en dicha época, de tales tradiciones arcanas, nunca hicieron algo por apropiarse del nombre Rosacruz y, muy bien, podían haberlo hecho sin dificultad alguna.
Lo curioso del caso, es que la Idea, el Arquetipo, siempre es más poderosa que su reflejo en la realidad del mundo y entonces se sale del tiesto donde fuera plantado por tan avispado o avispados personajes. Es decir, de un ánimo de hacer creer a los demás que una leyenda fue real, pues resulta que aunque no lo fuera en su día, ahora sí lo es. El Movimiento Rosacruz es algo real, tangible y que nadie se atrevería a desmentir.
Aplaudo a todos los movimientos esotéricos que pretenden cambiar al hombre desde su interior, ya que es el único modo de realizar ese cambio; pero entiendo que la Realidad, aunque cierta ahora, no se puede basar sobre una antigua mentira. ¿Qué la Orden Rosacruz existió alguna vez? Cierto, siempre ha existido, en el mundo de los Arquetipos como Idea primordial.
¿Qué se ha transmitido su enseñanza a través de los tiempos por medio de personas ordenadas ritualisticamente en sus pronaos y logias? Absolutamente falso. Las iniciaciones del Arquetipo Rosacruz son completamente internas y no siempre existió una tal organización con dicho nombre que transmitiese unos grados iniciáticos.
Ustedes saben, señores de Amorc, Lectorium, Rosicrucián, Fraternitas, y de otras organizaciones rosacrucianas, que su pretendida Historia se sustenta sobre mentiras, piadosas si quieren; pero hasta que no hagan frente a esa mentirijilla originaria del Origen de sus organizaciones, no podrán ser depositarios plenipotenciarios de las místicas enseñanzas de la Rosacruz interna.
La Rosacruz que, evidentemente, siempre existió, existe y existirá en el Mundo arquetípico de las Ideas que nos mostraron tanto Sócrates y Pitágora como Aristóteles y Platón, es Patrimonio de la Humanidad y de nadie en particular, por mucho que se registren sus siglas en los ministerios del interior de los distintos países del Mundo.
ARALBA
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